Previa del Real Madrid-Juventus: Hoy y ahora
“Me temo que lo único que hemos hecho es despertar a un gigante dormido y llenarlo con una resolución terrible”.
El entrenador bianconero Massimiliano Allegri debió sentirse como Isokuro Yakamoto tras el bombardeo de Pearl Harbor, al escuchar a Sergio Ramos, aún sobre el verde turinés del Juventus Stadium, convocando al Bernabéu para el partido de vuelta. “Tendremos que jugar mucho mejor para poder pasar”. De las palabras del italiano se infiere respeto, mucho respeto. Y quizás miedo por lo que pueda suceder esta noche
Se respira en el ambiente esa sensación única que rodea a los partidos especiales y que tendrá su máxima expresión a partir de las 18.30 horas en la Plaza de los Sagrados Corazones, cuando una marea blanca tome Chamartín. Decía anoche Muller que a veces crees haberlo vivido todo, pero que ante algo así se te pone la piel de gallina, refiriéndose al apoyo incondicional de su afición. Hoy nos toca a los madridistas estar a la altura de la importancia histórica de un duelo del que se hablará durante años.
Durante los 939 minutos que se llevan disputados de la presente Champions League, los Fans hemos peleado la 11ª en la Grada animando hasta la extenuación; incluso cuando hemos bailado con el precipicio de la eliminación, como en el partido ante el Schalke. Hemos acompañado al equipo en su peregrinar por Inglaterra, Alemania e Italia, empujando cuando las piernas de nuestros jugadores decían basta. Y hemos derramado en comunión, 80.000 fans, lágrimas de alegría con el gol de Chicharito.
Eso es el Real Madrid: sed de victoria. Una sed que no apagan los títulos y que obliga a cambiar de camiseta cada temporada para dar cabida a los nuevos méritos contraídos. Esta noche millones de aficionados contendrán la respiración ante un partido no apto para cardíacos, que requerirá dar lo mejor de nosotros mismos. Y nada ni nadie nos distraerá de nuestro objetivo. Tampoco el patio de monipodio en el que se ha convertido parte de la opinión mediática, que han roto los caminos a nuestra espalda llevando al paroxismo sus debates de farándula. Ni aquellos que se afanan en recordarnos que llevamos 28 años sin ganar una eliminatoria a un equipo italiano, que el Madrid no ha remontado nunca una semifinal y que jamás un club ha logrado en formato Champions dos copas seguidas.
Vamos a demostrarles qué equivocados están. ¡Qué poco conocen a los Fans y qué poco conocen al Real Madrid! Da igual el pasado, las estadísticas e incluso los títulos que adornan nuestra vitrina, da igual los jugadores que salten al césped… Cuando la copa de Europa nos mira a los ojos, y ésta lo ha hecho desde Berlín, para los madridistas no hay más horizonte que volver a casa con ella. No existe el mañana, es hoy y ahora.
Es sentimiento, pero no pasión ciega; hay razones para creer. El Madrid lleva 23 goles frente a sólo 15 de la Juve, y ha mantenido la portería a cero en 7 ocasiones por 6 del campeón italiano. Se está hablando mucho de la entrada de Paul Pogba en el medio, pero nosotros recuperamos arriba la magia de un Karim Benzema que hace fácil lo difícil.
Entre la zamarra de la 10ª y la de la 11ª nos separan sólo 180 minutos y dos viejos enemigos. Contra la Juventus hemos vivido momentos que permanecen imborrables en nuestro recuerdo: empezando y terminando por el gol infinito de Pedja en Amsterdam. El Gol que cambió la Historia. Antes de aquello, un imberbe Raúl se atrevió en el 96 a retar a Vierchowod, un defensa curtido en mil batallas al que sus compañeros llamaban “El Zar”, para acabar sucumbiendo en un agónico partido de vuelta en Delle Allpi en el que ambos equipos acabaron con 10 hombres y Michel lloró desconsoladamente su adiós a la ansiada Copa de Europa. Lo mismo pasaría 7 años después con el penalti fallado por Figo en el mismo escenario, quedándose el Madrid a las puertas de la Décima.
Hay cuentas pendientes y mucho en juego. Entre los madridistas sobran las palabras. Hoy se defiende el cetro de campeón de Europa y en Berlín espera el Barcelona.
Real Madrid – Juventus:
Previa, 18.30 horas, Plaza de los Sagrados Corazones
Partido, 20: 45 horas.
¿Te lo vas a perder?
