Crónica Real Madrid-Borussia Dortmund: ¡La Liga de Campeones es mi obsesión!

Rellenar Blog en 7 diciembre, 2017

 

Lo de anoche era justo lo que necesitábamos todos, el equipo y también la afición: un poco de alegría para el cuerpo para dar portazo a los malos resultados y coger aire para lo que viene, que es mucho.

La terapia Champions nunca falla para levantar los ánimos y renovar las ilusiones. No importa qué haya pasado en el partido anterior. Es imposible no venirse arriba al escuchar el himno de la competición de la que somos reyes absolutos.

Ayer lo pasamos en grande en la Grada. Disfrutamos al máximo de nuestro equipo, que siempre ofrece su versión más brillante en Champions, y especialmente de un Cristiano en modo Balón de Oro. Siempre es una alegría ver sonreír  y marcar goles a nuestro buque insignia.

Pero anoche también disfrutamos del resto de la afición presente, que tenía ganas de animar con nosotros al campeón de Europa. No hay sensación más mágica que la de animar todos juntos al Real Madrid. El Bernabéu es otro cuando anima. Imponente e implacable.

Seguiremos luchando sin descanso para conseguir que nuestro estadio sea un fortín en el que los partidos se cuenten por victorias.

La siguiente batalla será el sábado contra el Sevilla. Vuelve La Liga a casa y solo nos vale ganar. Estamos preparados. ¡VAMOS EQUIPO! ¡VAMOS BERNABÉU!

 

 

 

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